Va a parecer que vuelvo a escribir a petición del anonimo, pero pues no del todo jaja. La verdad es que mi vida se había vuelto un poco rutinaria. Cierto día de invierno se me metió en la cabeza intentar nuevas fórmulas de llevar mis relaciones... y pues las nuevas formas no funcionan jajaja,, sí las sigo probando pero da igual, digamos que con los hombres nunca se sabe (si se supiera ya no sería tan emocionante).
Lo que acontece es lo siguiente, estoy saliendo con un hombre mucho mayor que yo, me llevará unos 10 u 11 años y las cosas con él son algo diferentes. Creo que eso es lo que me cautiva... no es un hombre sexy pero si muy interesante (en su juventud fué sexy y cuando pone empeño en verse guapo lo logra- y yo me emputo porque las viejas se le resbalan!)... las noches no son locas pero las conversaciones son inteligentes. No salimos mucho, pero el tiempo que pasamos se hace sentir. Escuchamos música, compartimos datos, discutimos de diseño, política, farandula, cultura... de todo. Digamos que es un amante de cerebro más que de pene jajaja... ya estoy divagando, pero en parte es cierto. Las últimas veces salí con gente con la que me gustaba pasar un buen fucking time... pero con él es como quality time, eso de solo ir al grano... besos, abrazos y demás no me estaba llenando (no en el sentido literal) así que cuando del cielo me cayó este galán pues me aferré.
A veces es dificil, no dispone de tiempo como los demás... me debato siempre vs su apasionada forma de trabajar, pero no he querido decirle nada porque hacerlo cambiar implicaría regresar a mi antiguo patrón de relación. Hay ocasiones en que a su lado me siento un poco más vieja... no sé si sean las actividades que compartimos, dejar la fiesta ... a veces a los amigos o tener tan poco rush que me invade esa sensación... pero lo chistoso es que lo disfruto.
Sigo acomplandome a estar a su lado... es como si para él la montaña rusa fuera lo que para mí es el carrusel, pero de repente uno se acostumbra al suave movimiento del este último... y las montañas rusas de pronto te afectan de más el estómago. En fin, mejor dejo mis analogías demeritorias y me voy a acurrucar a su lado.
Besos!.
...historias e histerias...
